EMPRESAS EN UN DÍA

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EMPRESAS EN UN DÍA

2 de Mayo de 2013

Discurso de S.E. el Presidente de la República, Sebastián Piñera al entrar en vigencia Ley que permite constituir una empresa en un día

Santiago, 2 de mayo de 2013

Hace algún tiempo un amigo mío que quería emprender llegó eufórico, muy contento. Y le preguntamos qué tan bien le había ido con su emprendimiento. “Muy bien”, nos dijo. Y le preguntamos si había producido algo. “No, nada”. Si había vendido algo. “Nada”. ¿Y por qué estás tan contento entonces? “Porque por fin conseguí los permisos para poder emprender”.

Esa era la realidad de muchos emprendedores. No los quiero aburrir, pero la lista de trámites que había que hacer para formar una empresa era larga, cara y muchas veces mataba o deprimía el espíritu emprendedor. Había que contratar abogados para redactar una escritura de sociedad, ir al notario y llevar a todos los socios para que firmaran ante él. Después de todo eso, había que esperar las inscripciones y publicaciones respectivas en el Registro de Comercio del Conservador de Bienes Raíces y en el Diario Oficial. Y  solo después de ello, uno podía recién empezar otros trámites necesarios, como la iniciación de actividades y la obtención del RUT de la empresa. Eso es lo que esta ley cambiará.

Quiero ser muy transparente.  Para que esta ley opere y se pueda formar una empresa en un día, y prácticamente  sin ningún trámite, se requiere tener firma electrónica. Hoy día hay pocas personas que la tienen. Pero yo les aseguro a ustedes que muy pronto no tener firma electrónica en nuestro país va a ser como no tener carnet de identidad. Porque es un instrumento de la modernidad que va a permitir no solamente formar una empresa en un día; nos va a permitir hacer muchas cosas que antes requerían tiempo, desplazamientos, esperas, trámites, en forma instantánea, desde cualquier lugar, a través de Internet. De hecho, como Presidente de Chile, yo tengo una firma electrónica que me permite visar proyectos de ley o indicaciones estando en cualquier parte de Chile. Hoy uno puede firmar desde cualquier lugar de nuestro país usando muchas veces, incluso, el teléfono celular. Por eso, esta es una iniciativa importante.

¿Quiénes se beneficiarán con esta ley?

Por de pronto, les puedo decir que existen en nuestro país 670 mil empresas que corresponden simplemente a personas naturales y carecen de toda formulación jurídica en su constitución. Esas 670 mil personas van a tener la oportunidad, si así lo quieren, de crear una empresa que les permita dar un sustento jurídico a su emprendimiento.

Y, adicionalmente, existen 370 mil emprendedores informales. Con esta ley van a poder entrar al mundo de la formalidad y constituirse como empresas sin trámites, sin costo, sin obstáculos. Y así podrán incorporarse a todos los beneficios de desarrollo y promoción que existen en nuestro país para los emprendedores, particularmente  a través de Corfo, del Fosis, BancoEstado, Indap y muchas otras instituciones.

Por lo tanto, de entrada hay un millón de personas, que ya están emprendiendo, que se van a poder beneficiar de esta ley. Pero también se van a beneficiar los futuros emprendedores, aquellas personas a las que hoy día a lo mejor ni siquiera se les ha ocurrido una idea para emprender, o tienen solo un concepto dando vueltas en la cabeza. Porque así surgen las ideas, y el emprendimiento parte siempre por una idea.

Esta es una ley que tiene un objetivo muy claro: ayudar a ese millón de personas que van a poder utilizar este instrumento y facilitarle el camino a los que vendrán en el mundo de la innovación y del emprendimiento.

En nuestro programa de gobierno, planteamos como meta el surgimiento de 100 mil nuevos emprendedores, lo cual significaba más que duplicar la tasa de creación de emprendedores. No era una meta fácil y afortunadamente al día de hoy han surgido más de 170 mil nuevos emprendedores. Y yo espero que este proyecto de ley permita acelerar ese ritmo y seguir abriendo espacios para la innovación y el emprendimiento en nuestro país, porque no solamente es una fuente de riqueza, de oportunidades, de creación de empleos; también es una fuente de igualación de esas oportunidades, de nivelación de la cancha. Muchos de estos 170 mil nuevos emprendedores son mujeres; muchos son pequeños emprendedores.

Tenemos, por ejemplo, el caso de don Patricio Carrasco y su hijo Manuel, que vieron un problema y, lejos de ponerse a protestar, como buenos emprendedores  que son, pensaron de inmediato en buscar una solución y en encontrar una oportunidad para resolver o satisfacer esa necesidad. Ellos veían el tema del maltrato, acoso o abuso de nuestros niños en los jardines infantiles y decidieron crear un proyecto que permite a los padres verificar en tiempo real, a través de la web, cómo están sus niños en los distintos jardines infantiles y salas cuna de nuestro país.

Destaco ese proyecto, porque representa  la esencia del emprendimiento: detectar  una necesidad, encontrar una idea que ayude a resolverla y tener la fortaleza y la tenacidad para sacarla adelante. Esas son las características de un buen emprendedor.

Estoy seguro que el alma de la innovación y del emprendimiento está  presente  en muchos chilenos. Tal vez algunos nunca han tenido la oportunidad de desarrollar ese espíritu innovador y emprendedor, pero yo sé que los chilenos somos innovadores  y emprendedores; de lo contrario jamás habríamos sido capaces de transformar la colonia más pobre de España en el país con mayor ingreso per cápita y desarrollo de América Latina.

El papel del Estado en materia de emprendimiento

Por eso yo creo que éste es un tema que tiene particular importancia. Porque nos va a permitir fortalecer la capacidad de crecer, de crear empleos, de seguir mejorando los salarios, de seguir mejorando la calidad de vida. Pero, al mismo tiempo, va a ser un instrumento de nivelación de la cancha. Porque el emprendimiento no es solamente para los sectores más afortunados, no es solamente para aquellos que tienen una tradición en materia de emprendimiento. No. El emprendimiento está abierto como una oportunidad para todos aquellos chilenos que quieran transitar por este camino.

Ahora bien, este proyecto de ley parte por facilitar la constitución de una empresa. Pero no solamente vamos a facilitar el nacimiento de los nuevos emprendimientos. Vamos a acompañar a los emprendedores con ayuda técnica, capacitación y financiamiento para que tengan la oportunidad de que ese emprendimiento sea exitoso.

Nadie puede decir a ciencia cierta cuáles serán los emprendimientos exitosos. Cada vez que el Estado ha tratado de ser quien maneja el emprendimiento, ha contradicho el espíritu del emprendimiento y casi siempre ha fracasado. El emprendimiento, por esencia, tiene que ser libre, surgir del entusiasmo, de la iniciativa de las personas. Y por eso, este Gobierno no pretende ser el tutor ni el patrón de los emprendedores en Chile, pero sí pretende ser el mejor amigo y el mejor aliado de todas aquellas chilenas y chilenos que quieran emprender.

Y por eso hemos hecho del emprendimiento y de la innovación, dos prioridades muy importantes de nuestro Gobierno. De hecho, ayer tuve la oportunidad de anunciar otros dos proyectos que tienen relación con esto. El proyecto que permite a los estudiantes tener un contrato especial de trabajo, de modo que puedan compatibilizar sus estudios con el trabajo y que el hecho de trabajar no les signifique dificultades en la obtención de becas o préstamos. Es un proyecto que también apunta al emprendimiento, porque la gente joven está más propensa, está más preparada, para iniciar aventuras de emprendimiento. Y ese proyecto les va a facilitar empezar a emprender desde la etapa de la educación superior.

El otro proyecto es el que busca crear en Chile la cultura del trabajo desde el hogar, el teletrabajo. Antes las fábricas requerían que todos los trabajadores  estuvieran juntos, porque así conformaban una línea de producción. En una fábrica de automóviles, por ejemplo, uno ponía el parabrisas, el otro la puerta, el otro la ventana y todos tenían que estar juntos; era una línea de producción. Por eso, todas las personas tenían que trasladarse todos los días de su hogar a la fábrica y de la fábrica a su hogar. Pero el mundo moderno no es igual al del siglo XX o el siglo XIX. Hoy es perfectamente posible que muchas personas puedan trabajar desde su propio hogar utilizando las tecnologías de las comunicaciones. Y eso les permite, además, compatibilizar con mayor libertad su trabajo con su familia, con sus otras actividades, con sus estudios. Y, en consecuencia, el proyecto de teletrabajo o trabajo desde el hogar también va a fomentar el pequeño emprendimiento, ese que puede surgir en un hogar.

Por otra parte, les quiero recordar que si uno toma las 100 empresas más grandes del mundo, más de la mitad de ellas no existía hace 40 años. Eso demuestra que este mundo de la sociedad del conocimiento y la información está muy abierto y lleno de oportunidades para aquellos que tengan las ganas, las fuerzas y la voluntad de emprender.

A los emprendedores, y especialmente  a los futuros emprendedores  de Chile, yo les quiero decir que este Gobierno los va a acompañar, los va a apoyar, los va a seguir en su senda de crecimiento hasta que puedan estar bien parados en sus dos pies. Y entonces recién ahí los vamos a dejar seguir caminando por este mundo, para ir a acompañar a otros que están naciendo. Ése es el sentido profundo de esta ley.

Y quiero apreciar y agradecer la contribución que han hecho muchas personas. Por de pronto, a Juan Pablo Swett, que preside la organización de emprendedores, y también a los ministros que se han comprometido con entusiasmo. Porque hay emprendimiento en la agricultura, hay emprendimiento a través de Corfo, hay emprendimiento a través de ProChile, hay emprendimiento a través de Sercotec, hay emprendimiento a través de la Agenda de Impulso Competitivo.

Y, por último, quiero pedir a los diputados y senadores aquí presentes que también se transformen en grandes emprendedores  para sacar adelante esta gran Agenda de Emprendimiento que estamos impulsando con mucha fuerza y con mucho entusiasmo en nuestro país.

Muchas gracias.