El 13 de octubre de 2010, mientras los ojos del mundo estaban puestos en Chile, los rescatistas izaron la cápsula Fénix desde el fondo de la mina a la superficie. Cada minero fue recibido con muestras de júbilo, y todos aparecían mucho más fuertes de lo que nadie habría pensado.
En un mundo demasiado acostumbrado a la tragedia, el rescate dio pie a una celebración global. Los hombres ya no eran solamente mineros, eran héroes.
“Chile hoy día está más unido y más fuerte que nunca. Lo que terminó como una verdadera bendición de Dios, empezó como una posible tragedia. Pero la unidad, la fe, el compromiso, la lealtad, la solidaridad que expresaron los chilenos durante 70 días, nos llena de orgullo”.
Presidente Sebastián Piñera
10 de octubre de 2010
Día del rescate
“Espero que esto nunca más vuelva a ocurrir y usted como jefe máximo del país, estoy orgulloso de lo que ha hecho. Gracias a todos, gracias a los rescatistas, gracias a todo Chile y a todas las personas que han cooperado”.
Luis Urzúa
10 de octubre de 2010
Día del rescate